Monetario

No se pueden obtener resultados diferentes haciendo siempre lo mismo, me recordaba hace poco un amigo, en referencia a la expresión afín del finadito Alberto Einstein. Pienso en esto cada vez que veo los resultados de la monetarización. Encuentro a menudo, amigos y personas cualquiera, que se muestran encantados, por ejemplo, con el orden del tránsito en USA o cualquier otro país "desarrollado". Claro que nadie repara en que aquellos que supuestamente frenan para no pisarte, son los mismos que pueden arrojar una bomba atómica sobre una población sin que se les mueva un pelo. Este supuesto "orden" que para nada refleja calidad humana, impresiona muy fuerte los sentidos de los legalistas típicos lugareños, que inmediatamente dictan: MULTA!!! Bien decía también don Alberto, que el universo y la estupidez son infinitos, aunque respecto al universo se reservaba alguna duda. Toda vez que se intenta corregir una conducta agresiva mediante la aplicación de multas, lo que de verdad se está transmitiendo es que todo se arregla con dinero. En este contexto, todo podría ser comprado, incluyendo la conducta de las personas. Obviamente, solo pueden "comprar" los que disponen del dinero.